A vueltas con la realidad gallega y latinoamericana
Relaciono las dos orillas, porque en muchos sentidos no me parecen tan diferentes. Sobre todo cuando se trata de trabajar con docentes y su acercamiento al mundo de las Nuevas Tecnologías. Leo los blogs de los alumnos y alumnas del seminario, y me doy cuenta que hay patrones semejantes. Salvo excepciones, me encuentro, la mayor parte de las veces, con grupos humanos que tienen mucha resistencia a la integración de la tecnología en la enseñanza en cualquiera de sus niveles. Y esto no se produce intelectualmente, porque siempre afirman la importancia que hoy tienen las TIC en la sociedad que vivimos. El rechazo, el miedo, la apatía... se produce a un nivel mucho más complejo, que se expresa en el cuerpo, en la manera de apropiarse de las posibilidades que ofrecen, en las actitudes cotidianas. Estas generaciones de profesores y profesoras (en general) aún no viven como natural la presencia de la tecnología. Y muchos blogs se abren en los seminarios y cursos y no continúan alimentándose.
Por supuesto, de cada experiencia hay un grupo que continúa y comprende lo que esto significa. Gracias a eso, tenemos fuerza de continuar (gracias chicos)
En Córdoba (Argentina) expresan cosas parecidas a las que escucho por aqui (la falta de medios en los centros educativos, el origen social de los alumnos con escasos recursos...)
Pero leo el texto de Piscitelli y me parece que él está hablando de otro mundo. Hemos estado en la misma ciudad y casi al mismo tiempo, yo en una Universidad pública y él en una privada. La discusión está servida. Espero los comentarios del alumnado del seminario de la USC, porque esta vez se trata de alguien de allí, que dice, entre otras cosas: "Es impensable dar clase hoy en día en un aula que no tenga conectividad a internet". En principio tengo claro que eso es importante si realmente responde a una necesidad que surge del proyecto de enseñanza de ese profesorado, pero tengo miedo que me catalogue entre el grupo de pedadogogos/as "tradicionales siguen balbuceando protestas e imaginando parches que no tienen ningún sentido".
Imagino que muchos y muchas por allí tendrán algo que decir tambien.